'Hacia rutas Salvajes'. Excelente cine de aventuras

A menudo, y grácias al cine, imaginamos que eso de vivir aventuras es un pasatiempo de fin de semana. Pensamos que sería interesante volar a exóticos parajes y dejar de un lado las ataduras que nos atrapan en nuestro lugar de trabajo, en nuestro barrio, en nuestra família... pero seguramente no somos conscientes de lo que supondría realmente esa ruptura con nuestra vida diária y de lo implicaría tanto para nosotros como para los que conocemos.

Esto es, en parte, lo que propone Sean Penn en su último trabajo tras las cámaras, el seguimiento a modo de documental de un chico que decide romper con su vida en sociedad y lanzarse a la aventura de la vida autentica. Y el resultado es una hermosa y estimulante cinta que, a pesar de su pesimista último tramo, destila un contagioso sentimiento de libertad. Quizá deberíamos tratar al Penn director con un poco más de respeto, teniendo en cuenta que Clooney ya se lo considera un clásico mientras que al actor de Mystic River se le sigue viendo como un actor que dirige películas.

Hacia rutas salvajes es una cinta estimulante y trepidante. Avanza durante prácticamente todo su metraje de forma acelerada, combinando acontecimientos presentes, pasados y futuros de forma magistral y creando un discurso complejo y poliédrico. Pero, como he dicho, llega un punto en que la película relaja el ritmo y se vuelve pausada y más reflexiva que expositiva. A esto se le debe añadir un metraje excesivo de más de dos horas y una estructura que puede resultar (quizás) un tanto repetitiva. Realmente no se trata que el último tramo sea malo, pero el director debería haber invertido más tiempo en preparar una buena transición para que la frenada final no sea tan brusca.

A pesar de estos pequeños (pero importantes) inconvenientes, Hacia rutas salvajes es una cinta soberbia. Su director consigue ensamblar un producto excepcional, con unos paisajes espectaculares, un montaje asombroso y unos actores en estado de grácia. Conviene destacar el gran trabajo de Emile Hirsch, quien no para de sumar excelentes interpretaciones en películas de lo más varopintas (Los amos de Dogtown, Alpha Dog, La chica de al lado, Speed Racer...).

Una vez más, Penn ofrece la radiografía de los entresijos del alma humana cuando entra en contacto con situaciones límite. Se trata de una temática argumental que parece obsesionarle desde que rodó, en 1991, su primera película, Extraño vínculo de sangre. Y una vez más, consigue demostrar que cuenta con una voz própia y con un estilo personal que no se ve influenciado por modas tendéncias u opiniones ajenas. Y eso es algo de lo que no todos los directores actuales pueden presumir.

Lo Mejor: todo lo referente a la puesta en escena
Lo peor: su excesiva durada.

No hay comentarios :

Publicar un comentario

Últimos Posts